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Control y mantenimiento anual de la caldera.
Las siguientes operaciones de control y mantenimiento deben efectuarse
con frecuencia anual.
- Limpiar el intercambiador del lado de los humos.
- Limpiar el quemador principal.
- Verificar visualmente si el dispositivo de contratiro está deteriorado o
corroído.
- Controlar la regularidad del encendido y del funcionamiento.
- Controlar la calibración del quemador tanto para el agua sanitaria como
para la calefacción.
- Controlar el funcionamiento de los dispositivos de mando y regulación
del aparato, en particular:
- el disparo del interruptor general eléctrico de la caldera;
- el disparo del termostato de regulación de la instalación;
- el disparo del termostato de regulación del agua sanitaria.
- Controlar la hermeticidad del circuito de alimentación de gas. Para ello,
montar un manómetro en “U” o digital en la toma de presión situada
antes de la válvula del gas, cerrar la llave de interceptación de la caldera
y desactivar la válvula del gas; en los sucesivos cinco minutos no se
debe verificar ninguna variación de presión en el manómetro.
- Controlar el disparo del dispositivo de protección por falta de gas y la
llama por ionización; el tiempo de disparo debe ser inferior a 10 segundos.
- Controlar visualmente que no haya fugas de agua ni empalmes oxidados.
- Controlar visualmente que la salida de las válvulas de seguridad del
agua no esté obstruida.
- Después de haber descargado la presión del sistema llevándolo a cero
(lectura del manómetro de la caldera) controlar si la carga del depósito
de expansión es 1,0 bar.
- Controlar que la presión estática de la instalación esté entre 1 y 1,2 bar
(en frío y después de haberla llenado nuevamente abriendo la llave de
paso).
- Controlar visualmente que los siguientes dispositivos de seguridad y de
control no estén dañados ni en cortocircuito:
- termostato de seguridad de la temperatura;
- presostato de agua;
- termostato de control de expulsión de humos.
- Verificar el estado de conservación de los componentes de la instalación
eléctrica:
- los hilos de alimentación eléctrica deben estar alojados en los
pasacables;
- no se advierten trazas de ennegrecimiento o quemaduras.
Desmontaje del revestimiento.
Para facilitar el mantenimiento de la caldera es posible desmontar el
revestimiento de la siguiente manera:
- Quitar los dos tornillos que fijan el revestimiento (1).
- Tirar del revestimiento y al mismo tiempo empujarlo hacia arriba (ver la
figura) para poder extraerlo de los ganchos superiores.
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