Mantenimiento y cuidado
El acero es el más higiénico de los materiales. El
acero inoxidable es una aleación que combina las
propiedades mecánicas de los aceros con las
propiedades anticorrosivas propias de los
materiales nobles.
Basta dedicar un poco de atención y de tiempo para
mantener inalterados todo el brillo y la belleza de los
fregaderos.
Limpieza del aparato
Para la limpieza es aconsejable utilizar detergentes
neutros a base de alcohol o de vinagre.
Después de usarlo, secar el fregadero con un paño
de microfibra para evitar la formación de in-
crustaciones y de zonas opacas. Para la limpieza
bastará con limpiarlo con un paño humedecido en
alcohol desnaturalizado. El acero satinado se limpia
y seca siguiendo el sentido del satinado.
!
Evitar el contacto prolongado de esponjas
húmedas, sal, sustancias corrosivas o de objetos
muy calientes y ferrosos. Rayaduras y arañazos
pueden ser causados por el uso incorrecto del
fregadero: evitar utilizarlo como mesa de trabajo
para cortar.
!
El empleo de detergentes abrasivos o corrosivos,
como quitamanchas y productos anti-oxidantes,
detergentes en polvo y esponjas con superficie
abrasiva puede rayar irremediablemente la super-
ficie del fregadero.
!
No utilizar nunca máquinas limpiadoras al vapor o
de alta presión para la limpieza del fregadero.
El acero inoxidable puede mancharse por contacto
prolongado con agua muy calcárea o con deter-
gentes agresivos (que contienen fósforo). Se
aconseja enjuagar abundantemente y secar
después de la limpieza. También conviene secar
eventuales charcos de agua.
Eliminación
Para eliminar los materiales de embalaje: Respetar
los reglamentos locales, para que los embalajes
puedan ser reutilizados.
15
ES