NéoBulle Soins, Manual

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Llevado, un bebé descubrirá el mundo
acunado contra el pecho de su madre
o su padre. Ellos responderán a todas
sus necesidades de proximidad y
seguridad afectiva esenciales para un
bebé, sin dejar de ocuparse de sus
tareas diarias.
El bebé llevado en fular desarrolla una
relación particular con el que lo lleva. La
proximidad del adulto, su calor, su olor, los
ruidos de su corazón son muy relajantes y
recuerdan al bebé la seguridad uterina. El
niño que es llevado se siente envuelto, en el
amplio significado de la palabra, y descubre el
mundo con confianza adquiriendo así bases
importantes para toda su vida.
Llevado delante, en la cadera o en la espalda,
el niño está constantemente en contacto
visual y corporal con el adulto, cosa que le da
un gran sentimiento de bien estar y seguridad.
Envuelto dentro del fular, el pequeño es
acunado, balanceado, y todos sus sentidos son
estimulados de manera natural (vista, olfato,
oída, tacto, equilibrio…).
Los fulares portabebés largos o cortos, simples
o con anillas, aportan una
ayuda muy valiosa
en a vida con un recién nacido. Perfectamente
ajustables, con múltiples posibilidades de
nudos distintos, se adaptan perfectamente
a todas las parejas de portador y porteado
(tengan la talla que tengan los padres, la edad
del bebé, la necesidad de soporte del niño…) y
a todas las situaciones inclusive los gemelos,
las situaciones de enfermedad, hospitalización
o invalidez del niño o de uno de los padres.
Con las dos manos libres, el adulto ofrece
momentos muy ricos a su hijo sin dejar de
ocuparse de sus tareas cotidianas. El fular de
porteo pasa a ser un “ segundo par de brazos”
que muchos padres necesitan para atender
sus tareas o hijos mayores sin dejar a su bebé
llorando.
El fular de porteo es un portabebés que
permite al bebé coger la “ posición de ranita/
en cuclillas” que le es natural y estar bien
sujeto por una buena base, con la columna
vertebral perfectamente sostenida desde los
muslos hasta la nuca. Y así bien agarrado,
el bebé puede participar activamente del
porteo y hacerse más ligero para el portador.
El fular envuelve el cuerpo del bebé y del
adulto y reparte el peso del bebé de una
manera óptima. Así el adulto puede llevar
a un bebé o un niño sin ningún dolor de
espalda en particular. Proporciona un contacto
próximo, apoyado, simétrico y equilibrado que
permite que las manos del adulto queden
completamente libres.
Advertencias:
Dependiendo de si hemos
anudado correctamente el fular puede pasar
de ser muy cómodo a ser incomodísimo. Para
ayudarles a instalar correctamente el fular,
escoger la talla y los nudos adecuados, existen
muchos cursillos y talleres de porteo, que
les permitirán aprender mucho más sobre el
porteo con fular, descubrir diferentes nudos y
de practicar con su bebé. (ver página 14)
¡ Buen porteo !
¿ DONDE APRENDER ?
Con el fin de descubrir el porteo con todos sus
ángulos y de adquirir confianza en esta práctica,
les recomendamos de seguir un curso al lado de
personas formadas.
CONTACTO EN ESPAÑA:
Kangura :
www.kangura.com
info@kangura.com
¿POR QUÉ LLEVAR A SU BEBÉ?
¿DONDE APRENDER?