Información de salud y seguridad 157
La FCC también regula las estaciones base de las que dependen
las redes de teléfonos móviles. Mientras que estas estaciones
funcionan con mayor potencia que los teléfonos móviles en sí, el
nivel de exposición a la que se somete la gente debido a estas
estaciones base es generalmente miles de veces más bajo que al
que se expone debido a los teléfonos móviles.
Por lo tanto, las estaciones base no son el sujeto principal de las
preguntas de seguridad que se tratan en este documento.
¿Cuáles son los resultados de la investigación que ya se ha
realizado?
Los estudios que se han realizado hasta la fecha han arrojado
resultados contradictorios y en muchos de ellos se encontraron
fallas de métodos de investigación. Los experimentos en animales
para investigar los efectos de exponerse a la radiofrecuencia
característica de teléfonos móviles han arrojado resultados
contradictorios que a menudo no pueden duplicarse en otros
laboratorios. Sin embargo, unos cuantos estudios en animales han
indicado que niveles bajos de radiofrecuencia podrían acelerar el
desarrollo de cáncer en animales de laboratorio. Sin embargo, en
muchos de los estudios que indicaron un aumento en el desarrollo
de tumores se usaron animales cuya genética se había alterado o
se les había tratado con sustancias químicas cancerígenas para
que estuvieran predispuestos a padecer cáncer sin exponerse a
radiofrecuencia. En otros estudios se expuso los animales a la
radiofrecuencia por hasta 22 horas al día. Estas condiciones no se
asemejan a las condiciones bajo las que las personas usan
teléfonos móviles, de manera que no sabemos con certeza lo que
los resultados de esos estudios significan para la salud humana.
Se han publicado tres grandes estudios epidemiológicos desde
diciembre del 2000. Entre estos tres estudios se investigó toda
asociación posible entre usar teléfonos móviles y el cáncer
cerebral primario, glaucoma, meningioma o neuroma acústico,
tumores del cerebro o las glándulas salivales, leucemia u otros
tipos de cáncer. En ninguno de estos estudios se demostró que
exponerse a la radiofrecuencia de teléfonos móviles causara efecto
dañino alguno a la salud.
Sin embargo, ninguno de los estudios puede contestar las dudas
acerca de exponerse durante largo plazo, ya que el período
promedio de uso del teléfono en estos estudios fue de
aproximadamente tres años.
¿Qué tipo de investigación se necesita para decidir si
exponerse a la radiofrecuencia de teléfonos móviles
representa un peligro para la salud?
Una combinación de estudios de laboratorio y estudios
epidemiológicos de personas que utilizan teléfonos móviles
proporcionaría algunos de los datos necesarios. En pocos años
podría estudiarse la exposición en animales durante toda su vida.
Sin embargo, se necesitarían grandes cantidades de animales para
suministrar prueba confiable de la existencia de efectos
cancerígenos, si es que los hay. Los estudios epidemiológicos
podrían suministrar datos que pueden aplicarse directamente a las
poblaciones humanas, pero para resolver las dudas sobre ciertos
efectos para la salud, como cáncer, podrían necesitarse diez años
o más de seguimiento.